Malawi se convirtió en el cuarto país africano en implementar una regulación del cannabis. Es parte de un proceso que comenzó hace cinco años con la legalización del cannabis de usos industriales.
Malawi, cuya exportación principal es el tabaco, es uno de los países africanos más pobres y uno de los mayores productores de cannabis en el continente.
De la región de Malawi proviene una famosa sativa conocida como Malawi Gold: plantas que pueden alcanzar casi 4 metros de altura.
De esa región proviene una famosa sativa conocida como Malawi Gold: plantas de casi 4 metros de altura. En general presenta dos fenotipos: uno tiene un sabor y olor a maderas y tonos similares a la Haze y otro es frutal, intenso y generalmente se da en plantas más pequeñas.
La ley que aprobó el parlamento de Malawi aprobó despenaliza el cannabis para usos medicinales e industriales. Respecto al uso no medicinal, no hubo avances y continua prohibido con duras penas.