En medio de la pandemia, la industria cannábica muestra tener muy buena salud. Antes de la llegada del COVID-19, el mercado legal del cannabis vivía una verdadera primavera económica.
Naturalmente el crecimiento se realentó, pero las actividades relacionadas al cannabis legal se adaptaron y no dejaron de funcionar.
Ahora, en medio de una ola de desocupación, los distintos niveles de la industria de la marihuana comenzaron a emplear personas que se quedaron sin trabajo en otros rubros.
Uno de los ejemplos más contundentes fue cuando en varios estados norteamericanos se declaró oficialmente “esenciales” a los dispensarios y se les permitió mantenerse abiertos, incluso modificando normas para garantizar el distanciamiento social.
Ahora, en medio de una ola de desocupación, los distintos niveles de la industria de la marihuana comenzaron a emplear personas que se quedaron sin trabajo en otros rubros.
A principios de abril, el estado norteamericano de Colorado generó un programa que permite a los empleados de casinos y sitios de apuestas trabajar en negocios relacionados a la industria del cannabis.
En Estados Unidos tanto en casinos como en dispensarios, los trabajadores deben chequear los antecedentes de los clientes, lo que supone niveles de capacitación similares para admitir personas en los locales.
En medio de la crisis generada por el COVID-19, trabajadores desocupados de casinos, delivery, mensajería y gastronomía son recibidos por la industria del cannabis.
Dado que los casinos están cerrados desde mediados de abril, la medida también permite a los empresarios cannabicos contar con personal calificado y habilitado listo para trabajar en lugar de tener que esperar 15 a 20 días hábiles para las certificaciones del estado.
No es la única migración laboral que generó la pandemia: empleados de deliverys y mensajerías y atención al cliente en gastronomía también están virando hacia el sector cannábico.
Varios sectores de la industria del cannabis tiene mejores salarios para personal no calificado en comparación a otros rubros y, al menos en tiempos de pandemia, mantiene un movimiento que parece no frenar.