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Germinación cannabisGustavo Jaiyes / Revista THC

Germinación paso a paso

Una buena germinación define gran parte de nuestro cultivo de cannabis. Por suerte, con algunos pasos simples podemos saber si nuestras semillas van a brotar o no.

Por un lado depende del tiempo: cuánto más jóvenes sean las semillas, mayor vigor germinativo van a tener. Pero también es clave tener algunos cuidados para asegurarnos de que nuestras plantas van a dar bien su primer gran paso.

Para eso, tenemos que tener cuidado con el método de germinación. No es una ciencia, pero es esencial hacerlo adecuadamente.

Métodos de germinación de cannabis OVNI

Las semillas pueden germinarse en agua y directamente en tierra, pero uno de los métodos más efectivos es “el ovni”. Es muy simple:

  1. Poner las semillas entre un par de servilletas previamente humedecidas (y escurridas) dentro de dos platos hondos, previendo de que no cierren herméticamente para que el aire circule. Es recomendable usar un pulverizador con agua para humedecer las servilletas.
  2. Poner el ovni en un lugar oscuro y cálido. Esto es: entre 18 y 24 grados.
  3. Asegurarse de que el papel no se seque. La humedad no debe bajar del 60%. Para eso, chequear el OVNI cada 12 horas y en caso de que se esté secando, volver a humedecer las servilletas
  4. Si ponemos a germinar más de una semilla que la distancia entre ellas sea mínimo de un centímetro
  5. En promedio pueden tardar en abrirse entre 48 horas y una semana. En caso de que la semilla no sea nueva, puede llegar a los 10 días.
  6. Es importante no utilizar algodón en lugar de papel, dado que puede volver complicado el momento de pasar el brote al sustrato.
Germinación cannabis
El método OVNI: dos platos, dos servilletas, humedad y semillas. Simple y efectivo.

Cómo llevar el brote al sustrato

  1. Una vez que la semilla abrió y la pequeña radícula ya tiene al menos 2 cm, podemos sembrarla.
  2. Pueden usarse vasitos de plástico o un recipiente pequeño. Atención: si se trata de una planta autofloreciente debemos plantar en la maceta en la que la planta hará todo su desarrollo.
  3. Elegir siempre un sustrato liviano y aireado. Y regar.
  4. Hacer un pequeño agujero de unos pocos centímetros de profundidad.
  5. Colocar el brote hacia abajo.
  6. Tapar suavemente con tierra.

Si nuestra intención es cultivar en exterior, tenemos que considerar el clima: evitar semanas con lluvias intensas, calores fuertes, fríos extremos y cualquier condición límite.

Es recomendable que los primeros días del brote sean bajo luz artificial en interiores para evitar cualquier agresión del entorno: aves, insectos y vientos fuertes.