Cómo no existe una sola forma de cultivar o de usar la planta, tampoco existe el mejor recipiente donde guardar marihuana. Al igual que las genéticas de cannabis o las técnicas de cultivo, existen opciones de recipientes para todos los gustos y necesidades.
¿Cómo guardar marihuana?
Antes de pensar en un almacenamiento a largo plazo debemos tener en cuenta que tanto la materia vegetal como las extracciones (especialmente el hachís al agua) deben estar libres de humedad y con un mínimo curado, o al menos que ya no debamos abrir periódicamente los recipientes.
En cualquier recipiente debemos tener la precaución de introducir la mayor cantidad de flores posibles sin apretar o compactar, pero evitando que queden huecos de aire. Así se conservarán por mayor tiempo en condiciones ideales.
Lo ideal es utilizar recipientes herméticos que no permitan el ingreso o egreso de aire, lo que no sólo garantiza las condiciones de la marihuana guardada sino también que no se impregnará con aromas provenientes del espacio donde guardemos el recipiente.
Cajas de cartón
La alta respirabilidad del cartón lo vuelve un material ideal para realizar un secado más lento o como paso anterior al curado en frascos de vidrio, para homogeneizar la humedad y evaluar la eficiencia del secado.
No son aptas para el guardado a largo plazo y pueden emanar o absorber olores.
Cajas de madera
Las cajas de madera funcionan de manera similar al cartón: poseen una buena respirabilidad, por lo que permiten el intercambio de gases entre las flores y la atmósfera.
Existen cajas de madera con sistemas de humidificación que se utilizan para la conservación de tabaco, estas pueden ser aptas para el cannabis. Simplemente debemos tener en cuenta que la madera no es un material inerte y que puede influir en el sabor y el aroma de nuestra cosecha.
Latas metálicas
Distintos tipos de metales son usados principalmente para recipientes de uso diario, como latas o cajitas donde guardar papel, filtros, picador y unas cuantas flores.
En caso de elegir recipientes de metal, chequear que posean cierres herméticos y que el interior se encuentre protegido contra los elementos (principalmente agua y aire) que oxidan el metal y pueden contaminar nuestras flores con polvo de óxido, generando mal sabor.
Bolsas reutilizables con cierre
Son clásicas por sus ventajas: fáciles de conseguir, económicas, muy versátiles y vienen en infinidad de tamaños, algunos tan pequeños como un cáliz y otros que alcanzan para guardar una planta entera.
Existen también varias opciones de materiales con distintas resistencias, desde espesores casi descartables como los que se usan en repuestos de electrónica hasta bolsas que pueden cerrarse al vacío o exponerse a altas temperaturas.
A pesar de que tienen una vida útil no muy prolongada y el detalle que en los materiales más finos una ramita puede perforarlas, las bolsas reutilizables con cierre son parte de la canasta básica cannabica.
Tuppers de plástico
La evolución de las bolsas reutilizables son los tuppers de plástico, con infinidad de tamaños, formas, colores y materiales.
Se pueden conseguir con cierres con traba o válvulas para cerrar al vacío. Son adecuados para un almacenaje diario o un guardado a largo plazo, aunque existe la posibilidad en algunos tipos de plásticos, de una alteración del sabor o el aroma.
Frascos de vidrio o cerámica
El vidrio es un material inerte y económico, uno de los materiales más ideales donde guardar marihuana. Su popularidad es tal que los frascos de mermelada son tanto un recipiente como una unidad de medida para medir el éxito de una cosecha.
A pesar de su fragilidad, los frascos de vidrio continúan en el tope de la popularidad, gracias a que también son reutilizables y prácticamente gratis. Existen modelos más elaborados, con trabas para el cierre y válvulas de aire.
La cerámica se comporta de manera similar al vidrio y en muchos casos es completamente opaca, lo que garantiza la conservación de tricomas, aromas y sabores. Además, tiene un plus: son piezas de decoración que pueden armonizar con cualquier espacio de la casa.