En los últimos años, el interés por el cannabis medicinal creció significativamente, y ahora una nueva investigación sugiere que algunos cannabinoides podrían desempeñar un papel clave en la pérdida de peso.
Un estudio reciente publicado en la revista Cannabis reveló que el uso de una combinación de THCV (Tetrahidrocannabivarin) y CBD (Cannabidiol) está asociado con una reducción significativa del peso corporal, así como con mejoras en la circunferencia de la cintura, la presión arterial y los niveles de colesterol.
El estudio y sus hallazgos
La investigación fue realizada por la empresa de medicina basada en plantas NeX Therapeutics. Se analizaron los resultados de 44 participantes que usaron tiras orales que contenían una mezcla de THCV y CBD, mientras que otros recibieron un placebo. Durante 90 días, los participantes tomaron una tira diariamente en ayunas y fueron evaluados para determinar cambios en su peso y otros marcadores metabólicos.
El estudio mostró resultados significativos en la pérdida de peso y mejoras en la salud metabólica. Los participantes que recibieron la dosis baja de THCV y CBD (8 mg y 10 mg, respectivamente) experimentaron una reducción promedio de 2.6 kg, con un 66.7% de ellos mostrando una disminución en su peso corporal.
Aquellos que recibieron la dosis más alta (16 mg de THCV y 20 mg de CBD) lograron una reducción aún mayor, perdiendo en promedio 4.1 kg, con un 70% de éxito en la pérdida de peso.
En contraste, el grupo placebo apenas mostró cambios, con una disminución promedio de solo 0.1 kg. Además de la reducción de peso, el 95.8% de los participantes que consumieron la dosis baja y el 70% de los que tomaron la dosis alta presentaron una disminución en su circunferencia abdominal, lo que indica un impacto positivo en la distribución de grasa corporal.
También se registraron mejoras en la salud cardiovascular, con reducciones en la presión arterial sistólica y en los niveles de colesterol total y LDL, factores clave en la prevención de enfermedades cardíacas.
Estos hallazgos refuerzan la idea de que el THCV y el CBD podrían desempeñar un papel relevante en la regulación del peso y la salud metabólica, aunque se requieren estudios más amplios para confirmar estos efectos y comprender mejor los mecanismos involucrados.
Cómo funcionan el THCV y el CBD en la pérdida de peso
El THCV y el CBD actúan en el sistema endocannabinoide del cuerpo, que regula procesos como el apetito y el metabolismo. Se ha observado que el THCV bloquea los receptores CB1, lo que podría reducir el apetito y promover la quema de grasa. Por otro lado, el CBD ha sido relacionado con la mejora de la sensibilidad a la insulina y la reducción de la inflamación, factores clave en la regulación del peso.
Este estudio se suma a una creciente cantidad de investigaciones que relacionan el cannabis con un menor índice de masa corporal (IMC) y una mejor salud metabólica:
- Un estudio de 2023 encontró que los consumidores frecuentes de cannabis tienen un menor riesgo de obesidad en comparación con quienes no lo consumen.
- Investigaciones previas sobre el cannabigerol (CBG) indicaron que este cannabinoide podría tratar el síndrome metabólico al reducir el apetito y activar la grasa parda, responsable de quemar calorías.
- Un estudio de 2021 reveló que los adultos mayores que consumen cannabis tienen un IMC más bajo y realizan más actividad física que aquellos que no lo consumen.
- En 2019, se encontró que quienes usan cannabis antes o después del ejercicio entrenan con mayor frecuencia y disfrutan más la actividad física.
Consideraciones y limitaciones del estudio
Si bien los resultados son prometedores, es importante considerar algunas limitaciones del estudio.
En primer lugar, la muestra fue reducida, ya que solo 44 personas participaron en la investigación. Esto sostiene la necesidad de realizar estudios con un mayor número de participantes para confirmar los hallazgos y evaluar su aplicabilidad en una población más amplia.
Otro aspecto a tener en cuenta es la detección de THC en pruebas de orina. Aunque las tiras orales utilizadas en el estudio no contenían THC, el 77.8% de los participantes que recibieron la dosis más alta dieron positivo en los test. Esto indica que los metabolitos del THCV podrían ser detectados erróneamente como THC, lo que podría generar problemas en contextos donde se realicen controles de sustancias.
Por último, los participantes no realizaron cambios en su dieta ni en su nivel de actividad física durante el estudio. Esto significa que la pérdida de peso observada se debe exclusivamente al consumo de los cannabinoides, sin que otros factores influyeran en los resultados. Aunque esto refuerza la efectividad del THCV y el CBD en la reducción del peso, también deja abierta la posibilidad de que una combinación con hábitos saludables pueda potenciar aún más los efectos.
Aunque aún se necesitan más investigaciones para confirmar estos efectos y determinar la seguridad a largo plazo, esta evidencia podría abrir nuevas puertas en el uso del cannabis para el control del peso y la prevención de enfermedades metabólicas.