Marcelo Somma / Revista THC
El ataque de insectos es uno de los principales desafíos que tenemos por delante para llevar un buen cultivo. Principalmente, en la temporada de verano en exterior es cuando más se hacen presentes, por ejemplo las arañas rojas, poniendo en riesgo el éxito de nuestro trabajo.
Ya hemos visto las distintas condiciones ambientales de temperatura y humedad que favorecen la aparición de cada plaga, también distintas prácticas que nos ayudan a su control y los distintas opciones de productos que hay para combatirlas. Ahora inspeccionaremos una las plagas más habituales, cómo reconocer y combatirla en caso de ser necesario.
Las indeseables arañas rojas
Amantes de las altas temperaturas, las arañas rojas son uno de los principales enemigos de los cultivos de verano en exterior y de aquellos indoors en donde no está controlado el ambiente. Suelen emerger con facilidad con unos 25 °C (o más) y baja humedad.
Las arañas rojas suelen emerger en ambientes con 25 °C o más de temperatura y baja humedad.
Suelen tejer telarañas y cuando infectan las hojas de la planta, producen daños al tejido. Se van alimentando del fluido de la planta y si la plaga no es controlada y las condiciones ambientales le son favorables, pueden tomar toda la planta en cuestión de días y hasta ocasionar su muerte.
Reconocimiento
Son ácaros muy pequeños, de entre 0,4 y 0,5 mm, de una coloración principalmente roja. Suelen encontrarse en el envés de las hojas, por lo que hay que revisar bien para encontrar la plaga antes de que se expanda. Por otro lado, también las podemos reconocer por el daño que van generando, ya que van dejando pequeñas manchas entre blancas y amarillas a medida que van lacerando las hojas.
Control de arañas rojas
La prevención en materia de plagas es fundamental. Si nos encontramos una plaga de arañas rojas dependiendo el estadio de la planta, tendremos distintas opciones.
El aceite de neem con jabón potásico y extracto de canela suele ser un excelente preventivo, pero es muy difícil tratar una planta cuando la plaga ya está muy extendida y las condiciones ambientales le son favorables.
Durante el vegetativo podemos controlarlas con abamectina, que es un insecticida sistémico muy efectivo contra este tipo de ácaros.
Sin embargo es tóxico, por lo que debemos respetar su período de carencia, por lo que no debemos utilizarlo avanzada la floración y nunca en caso de cultivos medicinales.
Una manera de tratar esta plaga durante la floración es eliminando las hojas afectadas y lavando la planta entera varias veces por semana con una solución con 2,5 ml de alcohol y 5 ml de jabón potásico por litro de agua. También podemos agregarle extracto de canela.