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cannabis ansiolítico

Efectos de la legalización: el cannabis reduce el uso de ansiolíticos

En los estados de EE.UU. donde el cannabis medicinal y de uso adulto es legal, menos personas están recurriendo a medicamentos para tratar la ansiedad. Así concluyó un estudio recientemente publicado en JAMA Network Open.

El estudio fue realizado por investigadores del Instituto de Tecnología de Atlanta, Estados Unidos y analizó cómo la legalización del cannabis y la apertura de dispensarios influyeron en la cantidad de recetas de psicofármacos para la ansiedad entre personas con seguro médico privado.

Entre los medicamentos estudiados se incluyeron las sustancias más populares como las benzodiacepinas, que aumentan los niveles del neurotransmisor GABA para generar un efecto ansiolítico, los antipsicóticos, antidepresivos como los ISRS (inhibidores de la recaptación de la serotonina) y algunos barbitúricos e hipnóticos usados en el tratamiento del insomnio, que no mostraron cambios significativos respecto entre el antes y el después de la regulación del cannabis.

Los investigadores encontraron evidencia consistente de que un mayor acceso al cannabis está relacionado con una reducción en la cantidad de recetas de benzodiacepinas que son efectivamente retiradas de farmacias. Sin embargo, no todas las leyes estatales tuvieron el mismo impacto en los patrones de prescripción.

Por qué es relevante este hallazgo

En 2021, casi el 23% de los adultos en EE.UU. reportaron tener un trastorno de salud mental diagnosticable, pero solo el 65.4% de ellos recibió tratamiento. La falta de atención adecuada puede agravar estos problemas y aumentar el riesgo de enfermedades crónicas adicionales.

El acceso al cannabis representa una alternativa a los medicamentos tradicionales, especialmente en estados donde las leyes permiten su uso medicinal para trastornos como el estrés postraumático (PTSD). Además, la legalización del uso adulto amplía su disponibilidad para todas las personas mayores de edad.

Otro punto interesante del estudio tiene que ver con la crisis del fentanilo y los opioides que sucede en Estados Unidos en los últimos años. Las benzodiacepinas pueden ser peligrosas, especialmente cuando se combinan con opioides. En 2020, un 14% de las muertes por sobredosis de opioides en EE.UU. involucraron benzodiacepinas. Si el cannabis puede sustituir estos medicamentos en ciertos casos, podría reducir los riesgos de efectos adversos y abuso.

Sin embargo, los investigadores advierten que su estudio no puede confirmar si esta disminución en el uso de benzodiacepinas ha llevado a mejoras en la salud de los pacientes. Si bien hay evidencia de que el cannabis puede ser eficaz para tratar la ansiedad, aún no está claro si es tan efectivo como las benzodiacepinas.

El estudio también observó un leve aumento en la prescripción de antipsicóticos y antidepresivos, aunque los resultados varían según el estado. Este detalle plantea la interrogante de si el acceso al cannabis podría influir en el desarrollo de trastornos como la depresión o la psicosis aunque es una especulación basada simplemente en estadística.

Cada estado en EE.UU. regula el cannabis de manera distinta, lo que podría explicar las diferencias en los efectos observados. Para los formuladores de políticas, estos hallazgos podrían ser clave para diseñar regulaciones que maximicen beneficios y reduzcan riesgos.

El estudio señaló una tendencia clara: en estados donde el cannabis es legal, menos personas están usando benzodiacepinas y psicofármacos para el tratamiento de la ansiedad. Si bien este hallazgo es prometedor, es necesario seguir investigando para entender los efectos a largo plazo del cannabis en la salud mental y su potencial como tratamiento alternativo.