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Inglaterra: 6 de cada 10 habitantes apoyan la legalización de los hongos mágicos

La psilocibina, el principio activo presente en los hongos del género Psilocybe, es una de las sustancias que experimentó un auténtico renacer científico en los últimos 20 años. Y ahora, a las regulaciones que permiten su uso en EEUU y Canadá, se sumaría Inglaterra.

Una encuesta realizada por la organización PsiloNautica, dirigida por el neurofarmacologo y asesor del gobierno inglés David Nutt, concluyó que al menos el 55% de los encuestados apoya una regulación que simplifique la investigación sobre la psilocibina y sus efectos mientras que sólo un 13% apoya la regulación actual.

Un 58% estaría a favor de una ley que permita el uso de psilocibina para depresión o ansiedad en pacientes terminales y un 59% usaría psilocibina para tratar alguna afección para la que exista suficiente evidencia científica.

La percepción de otras regulaciones en el mundo también fue positiva: un 68% apoyó las medidas que permiten el uso medicinal y experimental de los hongos mágicos en Canadá

Un 58% de los británicos estaría a favor de una ley que permita el uso de psilocibina para depresión o ansiedad en pacientes terminales y un 59% la usaría para tratar alguna afección para la que exista evidencia científica.

La encuesta, realizada en colaboración con la consultora YouGov, obtuvo las respuestas de 1.763 adultos de todas las regiones y grupos demográficos del país.

Se trata de una de las encuestas más grandes realizadas hasta ahora evaluando la percepción pública de los avances en la investigación con psilocibina, que se perfila como uno de los futuras medicinas con mayor potencial para el tratamiento de condiciones como la depresión, el estrés postraumático o la ansiedad.

Usos medicinales 

Un reciente estudio realizado por el Imperial College de London concluyó que la terapia asistida con psilocibina era tan efectiva como el antidepresivo escitalopram (un ISRS).

Además se destacó una reducción más rápida de los síntomas y un porcentaje más alto de remisión, es decir la desaparición total de los síntomas al final del estudio.

En pacientes que cursan enfermedades mortales el potencial es igual de prometedor: estudios en las universidades estadounidenses de UCLA (Los Angeles), NYU (Nueva York) y John Hopkins (California) demostraron la capacidad de la psilocibina para tratar la depresión, desmoralización y ansiedad, relacionadas con la inminencia de la muerte.

La psilocibina ha demostrado ser mucho más efectiva que los tratamientos tradicionales en casos de depresión, desmoralización y ansiedad, logrando en muchos casos la superación de estos cuadros

Si bien, personas en estas situaciones límite no suelen responder eficientemente a los antidepresivos y tratamientos tradicionales, la terapia con psilocibina es una gran ayuda. Según el estudio de la NYU puede prolongarse hasta cuatro años y medio después de la ingestión/terapia.

Pero no todo el potencial que esconde la psilocibina se relaciona con las patologías mentales o psiquiátricas. A principios de los años 2000, una encuesta por internet sobre cefalea en racimos concluyó que una gran cantidad de pacientes, que además usaban psilocibina con fines espirituales, también experimentaban menos episodios de cefalea.