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preso lupin argentina

Es cultivador y estuvo 7 meses preso por un mega operativo mediático

Nicolás Lupín ya está en su casa. Está de regreso luego de pasar 7 meses eternos dentro del penal de Villa Floresta por cultivar cannabis. Y ahora, estará preso en su hogar hasta que la Justicia defina su situación.

Nicolás llegó al pabellón de Villa Floresta empujado por una causa que estuvo repleta de irregularidades que finalizó con 14 jóvenes usuarios y cultivadores detenidos.

Días atrás le otorgaron la prisión domiciliaria por cuestiones de salud, volvió a la localidad bonaerense de Puán y asegura que es muy difícil retomar el día a día.

“Pasó una semana y recién estoy cayendo que salí”, cuenta Nicolás en diálogo con Revista THC.

“Los primeros días no notás que volviste a tu casa, estás tan metido en esa vorágine penal que no te permite ver. Tengo que superarlo, pero todo el tiempo estoy con miedo de volver al penal”, repasa lleno de preocupación.

Un abuso público

La detención de Nicolás Lupín se produjo el 15 de diciembre de 2020. Ese día quedó detenido e imputado por “comercialización de estupefacientes en dosis fraccionadas destinadas directamente para el consumo” y “tenencia de estupefacientes en dosis fraccionadas destinadas directamente para el consumo”.

Nicolás tenía 15 plantas sin sexar, sin embargo su detención fue en el marco de un mega operativo del Ministerio de Seguridad que incluyó un total de 23 allanamientos en distintos domicilios de Bahía Blanca, Pigüé y Puan, en el que buscaban una supuesta banda narco.

Nicolás tenía 15 plantas sin sexar, sin embargo su detención fue en el marco de un mega operativo del Ministerio de Seguridad que incluyó un total de 23 allanamientos en distintos domicilios de Bahía Blanca, Pigüé y Puan

El conjunto de allanamientos en el que fue detenido Nicolás y otras personas fue presentado en las redes del Ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni. Algo similar a lo ocurrido en el caso de de Daniel Tornello, el cultivador al que llamaron «Cara de cannabis» quien cultiva para su esposa con epilepsia y hoy sigue detenido acusado de comercialización.

La detención de Nicolás generó que sus familiares, amigos y vecinos de Puán se movilizaran para pedir su libertad.

“Nico no es un integrante de una banda, es un chico que solo tenía plantas en su patio para consumo personal”, comentó Fabiana Herreno, su madre.

De hecho, las agrupaciones y organizaciones sociales argentinas se sumaron al pedido de la libertad de Nico.

El caso también llegó a Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora: “Quiero pedir la libertad inmediata de Nicolás Lupín, detenido con la excusa de narcotráfico. Este chico tenía simplemente unas plantas de cannabis en su casa, nada más. Libertad ya para Nicolás Lupín en nombre de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora”, exigió Nora Cortiñas en un video que se hizo viral por las redes sociales.

Secuelas

“Internamente te queda esa sensación de no querer que la causa se mueva ni un milímetro para que no te metan adentro de nuevo”, relata Nicolás. 

Esta sensación de miedo de la que habla se repite como patrón común en cada una de las personas que fueron allanadas y detenidas.

“Los internos y guardias nos decían mirá por la pelutedez que están detenidos en un penal. O también nos decían qué hacen acá, no tienen cara de mandarlos acá adentro“, cuenta Nicolás

Son secuelas de la violencia que comienza con un allanamiento y continúa en todo el proceso que lleva adelante el sistema penal. 

“En los primeros días estuvimos en narcóticos y éramos 17 personas en un espacio de 4 metros en condiciones indignas”, recuerda Nicolás.

“Luego nos llevaron a la Unidad 4 de Villa Floresta y los primeros 15 días estuvimos en el buzón. Después ya nos dejaron en el módulo 1: estaba ahí por haberle convidado porro a un amigo, con una posible pena de 4 a 15 años”. Así fue el laberinto que Nicolás, como miles de otros detenidos, tuvo que atravesar. 

Respecto a los criterios que aplica la Justicia a partir de la ley, Nicolás es categórico: “Tratan de hacer con el uso y el narcomenudeo lo que no hacen con el narcotráfico. Aumentan los números agarrando a perejiles. Es la forma en la que trabajan”.

Nicolás fue uno de los 4 jóvenes de Puan que recibió la domiciliaria. También les fue otorgada a Gonzalo Mauricio Gómez y Lautaro Van Schaik por cuestiones de salud y Fausto Alonso por tener menores a cargo.

Además esperan por la respuesta de la Cámara de Apelaciones por las domiciliarias de Ignacio Parodi (por tener un familiar a cargo) y Mauro Distel (por salud).

Miradas en el calabozo

Nicolás se enteró de varias historias de personas que estaban detenidas en Villa Floresta por plantar o por portar unos porros en la calle.

Incluso muchas de las otras personas detenidas no podían creer que estuviesen presos en un penal por ser usuarios y cultivadores.

“Los internos y guardias nos decían mirá por la pelutedez que están detenidos en un penal. O también nos decían qué hacen acá, no tienen cara de mandarlos acá adentro“.

Y no eran los únicos: “Nos enteramos de 3 o cuatro casos de chicos que habían sido detenidos por cultivo o que los agarraron por unos porros  y están hace más de un año adentro”.

Nico hoy se encuentra con su familia, pero no para de pensar en que todavía hay 10 chicos detenidos desde finales del años pasado.

El proceso en contra de Nicolás continúa: “Internamente no querés que la causa se mueva ni un milímetro para que no te metan adentro de nuevo”

Si bien la causa continúa, la salida fue un respiro. “Ver el portón del lado de afuera es una locura. En el viaje me flasheó ver el amanecer después de 7 meses, porque en el penal no se ve, solo ves el muro. Y llegar a casa fue hermoso, increíble”.

Pero Nicolás no deja de pensar en las 10 personas que siguen del otro lado de esa pared. “Están adentro, al menos hasta que salga la elevación a juicio o en el mejor de los escenarios, que el peritaje de la firma de Kevin salga negativo”, detalla Lupín.

Se refiere al peritaje de la firma de Kevin Torres, joven que se presentó en los Tribunales de Bahía Blanca para aclarar que nunca había sido testigo en el caso de Puán.

El peritaje sigue en suspenso. Cuando los familiares de los detenidos intentaron conocer el por qué había sido postergado, no obtuvieron respuestas.

Mientras la Justicia se toma su tiempo, Augusto Francis Amigo, Uriel Alexander García, Marcos Distel, Juan Francisco Distel, Mauro Distel, Diego Schnaider, Alexis Neuman, Diego Armando Krieger, Ruben Parodi y Ludmila Geraldine Paz Madrid siguen detenidos en Villa Floresta.