Mediante el Decreto 833/2024, publicado recientemente en el Boletín Oficial, el gobierno de Javier Milei decidió intervenir la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME).
Este organismo fue creado tras la sanción de la Ley 27.669, que reguló parcialmente la actividad del cannabis en Argentina, permitiendo el cultivo con fines medicinales e industriales.
Según esta ley, la ARICCAME tiene como misión “la regulación de la importación, exportación, cultivo, producción industrial, fabricación, comercialización y adquisición de semillas de la planta de cannabis, del cannabis y de sus productos derivados con fines medicinales o industriales”, lo que posiciona a la agencia como una pieza clave en el desarrollo de este nueva rama agroindustrial.
La Agencia se encuentra prácticamente paralizada desde diciembre pasado, el decreto buscaría cambiar ese escenario.
En la publicación del Boletín Oficial se afirma que la agencia “evidencia una falta de personal, una inadecuada operatividad, falta de emisión de licencias y autorizaciones habilitantes, así como una significativa demanda por parte del sector privado”. Además, se señala que “se hace imprescindible la reducción de la carga burocrática existente”.
¿Por qué el gobierno nacional interviene la ARICCAME?
Si bien no hay mayores precisiones, la intervención se fundamenta en la necesidad de mejorar la eficiencia administrativa de la Agencia.
El decreto asegura que “resulta un objetivo fundamental proporcionar una mayor eficiencia en las gestiones y trámites, unificar procedimientos administrativos y expedientes, dar intervención a los organismos con competencias específicas involucrados y facilitar el acceso y difusión de la información de manera homologada, estandarizada, actualizada e integrada”.
Este “rediseño organizativo” tendría como objetivo reorganizar la agencia durante un plazo de un año, que podría extenderse hasta septiembre de 2025 si fuera necesario.
En este marco, el gobierno designó a Ignacio Ferrari al frente de la intervención. Ferrari es oftalmólogo y tiene una diplomatura en endocanabinología y medicina cannábica. De hecho, es el presidente de la empresa Cannaradix y del Instituto Argentino de Endocannabinología.
“En el ejercicio de su cargo, el Interventor tendrá las facultades y competencias establecidas para la ARICCAME”, afirma el decreto firmado por el presidente Milei, junto con Guillermo Francos y el Ministro de Economía, Luis Caputo. Entre las primeras tareas de Ferrari, se encuentra la elaboración de un informe detallado sobre la situación de la agencia y la “regularización y reordenamiento de programas y proyectos”.
Hasta el momento, la ARICCAME no otorgó licencias habilitantes, sino permisos provisorios a una serie de proyectos que funcionan actualmente.
Lo cierto es que la ARICCAME tiene un rol crucial para que finalmente Argentina cuente con una nueva industria en base al cannabis, independiente de las restricciones que siguen pensado sobre el uso no medicinal de la planta.
La intervención otorga amplios facultades al Ministerio de Economía encabezado por Luis Caputo y a Juan Pazo, Secretario de Coordinación de la Producción, para ejercer control sobre el presupuesto, permisos y la reestructuración del organismo.
El decreto aclara que “Economía prestará los servicios relativos a la ejecución presupuestaria, contable, financiera, de compras, de recursos humanos y en materia jurídica”, hasta que ARICCAME esté completamente reorganizada.
Cómo es actualmente la estructura de la ARICCAME
Los objetivos establecidos para la Agencia son la regulación y el fomento de la industria del cannabis medicinal y el cáñamo.
Las principales funciones del organismo son la regulación de la importación, exportación, cultivo, producción industrial, fabricación, comercialización y adquisición de semillas de la planta de cannabis, del cannabis y de sus productos derivados con fines medicinales e industriales (por debajo del 1% de THC).
Dentro de las competencias de la ARICCAME está controlar y emitir las diferentes autorizaciones (entre ellas las licencias que se establezcan) relacionadas a la cadena productiva de la planta de cannabis, sus semillas y los productos derivados.
El funcionamiento interno de la Agencia fue pensado con un Directorio, encabezado por un presidente y conformado por otros 4 representantes de los ministerios y secretarías:
- Ministerio de Economía
- Ministerio de Salud
- Ministerio de Seguridad
- Ministerio de Ciencia y Tecnología (actualmente transformado en Secretaría)
- Secretaría de Agricultura
A su vez, la estructura de la ARICCAME prevé un Consejo Federal de carácter consultivo que será el encargado de representar los intereses de las Provincias, la Nación y la Ciudad de Buenos Aires, y varias Gerencias pensadas para el desarrollo de funciones específicas.
Por el momento, se desconoce si habrá modificaciones en esta estructura. Lo que es un hecho es que se quita el Consejo Consultivo Honorario, una herramienta participativa que tiene gran relevancia en el marco de programas como el REPROCANN, donde especialistas y ONGs aportan su visión para el desarrollo de las políticas públicas.