Las plantas de cannabis dependen de una serie de elementos químicos para poder crecer y desarrollarse de manera óptima. La principal fuente de estos nutrientes es el suelo. Ellas absorben los minerales, los combinan con los otros elementos químicos para formar las células vegetales, reforzar su estructura, reparar partes dañadas, producir flores y semillas.
A lo largo del cultivo, las plantas agotan estos nutrientes del medio en que se desarrollan. Si falta alguno de ellos, las carencias se expresan tanto en su follaje como en la velocidad de desarrollo. Esta es la forma en que podemos reconocer sus necesidades nutricionales.
El nitrógeno
Dentro de todos estos nutrientes, hay tres que son los que las plantas más consumen, llamados macronutrientes primarios: nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K). La demanda de estos macronutrientes varía en los dos ciclos de vida de las plantas: durante el crecimiento vegetativo utiliza mayor cantidad de N que durante la floración, donde necesita una mayor cantidad de P y K.
El N es fundamental en la producción de clorofila. Su disponibilidad influye en el desarrollo de las hojas y la velocidad de crecimiento. Es importante que la planta no sufra carencias de N, en especial durante la etapa de crecimiento. En floración es importante, aunque en menor medida.
Signos de carencia: hojas amarillas en cannabis
El primer síntoma es un crecimiento lento. Luego, como es un nutriente móvil (lo que quiere decir que puede trasladarse dentro de la planta según sus necesidades, yendo de las partes bajas a la punta de crecimiento), se hace evidente en las hojas más viejas (las inferiores).
Al faltar la clorofila, las hojas más viejas toman un color verde claro y se vuelven amarillas entre sus nervaduras. Si la carencia continúa, las hojas amarillean hasta palidecer y la decoloración se va extendiendo hacia las hojas de más arriba.
Hojas amarillas en cannabis: cómo resolverlo
Ante todo debemos reconocer en qué momento de vida está la planta: no es lo mismo una carencia de N en vegetativo que en floración. A su vez, no es lo mismo en floración temprana, que en floración avanzada, ya que en este último caso, cuando la planta está cumpliendo su ciclo, es esperable.
En vegetativo, si detectamos una carencia de N, si bien podemos usar distintos abonos, como harina de pescado, la mejor solución es realizar un trasplante a una maceta con sustrato renovado que doble el tamaño de la anterior.
En floración, podemos solucionarla regando con un té de compost. En ambos casos, las hojas afectadas no se recuperarán, pero la carencia no seguirá extendiéndose hacia arriba.